Queridos niños, tras asumir que para ojos de no se sabe quién soy una tofi, he decidido hablar sobre la inclusión de las tallas grandes en importantes marcas de moda y del boom de las modelos de ídem. Un 2×1 que hace tiempo está presente en los medios de comunicación. Sumad a esto la participación de una de esas “grandes” modelos en el próximo Calendario Pirelli y ya tenemos entretenimiento para rato.
¡Cuántos han aplaudido esta novedad! Bien, hay doce meses y una modelo de ese tipo ¿Seguro que es para aplaudir? UNA modelo de talla grande y porque, tristemente, al ser novedad destaca como noticia, tachándolo como… ¿Cómo dicen ahora? Ah sí, el inicio de la revolución de las tallas. No lo tengo tan claro. Porque frente a ella, hay once Pirellianas que siguen siendo las de siempre. Las que afirman que se mantienen en forma SOLO comiendo equilibradamente, corriendo detrás de sus niños y durmiendo ocho horas. Todos sabemos que un cuerpo como el suyo lo tenían nuestras madres cuando éramos niños, cuando comían menos porque se preocupaban de que nos acabáramos todo lo que había en el plato, cuando corrían para evitar que nos acercáramos peligrosamente a la carretera y lo de dormir…vale, por eso mi madre no es como la Schiffer: yo no le dejaba dormir ocho horas.
Después de esta introducción… ¿Somos idiotas o qué?
- Las modelos con lorzas son todas guapas, que sí que la belleza es subjetiva…TURURÚ, son tan guapas que dejan al Photoshop aburrido y gritando “¡Dejadme retocar algo!”. Al contrario que ocurre con las maniquíes de “toda la vida”- a esas que retocan hasta los lunares- las de talla grande son bellezones. Conclusión: gorda pero guapa si no, no sirves.
- Ahora resulta que las que son mujeres reales son las entradas en carnes, el resto somos producto de la imaginación de nuestros padres ¿no? Cuando camino por la calle y veo a todas esas mujercillas y mujeronas de todos los estilos, tallas y colores…son reales. Se las puede tocar, saludar… hasta empujarlas si quiero. TODAS somos reales. No me he topado con ninguna que sea un dibujo animado y cuando lo haga…os escribiré desde el manicomio más cercano.
- (Primer) Cuidadito con esto de la talla grande, que ya he leído algún otro artículo cuyo autor habla orgulloso sobre el auge de la talla grande… refiriéndose a la 40 (supongo que el autor sea el primo de quien escribió aquello de las “100 experiencias vitales” y hermano del que se metió con los tofis). Aunque tiene razón: en el mundo de la moda si no tienes una 34, eres modelo de talla grande, así de simple.
- (Segundo) Cuidadito con el concepto gordura, ¿a qué se le llama estar gordo? Si ya he comentado que alguno ha soltado con toda su alegría que la 40 es una talla para gordas ¿Quién es el responsable de decir qué es talla grande y qué no?
¿Qué se concluye de todo esto? Pues que no hay cabida para el punto medio. Como persona que se mueve de un extremo a otro, nunca pensé que fuera a reivindicar tal cosa, pero es que el tema ya cansa. Delgadas, gordas, tofis, atléticas, altas, bajas, con mucho o poco pecho …la cosa es quejarse y etiquetar…siempre etiquetar. No existe el punto medio entre lo delgado y lo gordo, entre lo tofi y lo atlético, entre los pechos tamaño sandía y las de tamaño mandarina…a pesar de que lo medio es lo que abunda.
Aunque alguno me llame cruel por ello, con tanta etiqueta y, mientras me como unas patatas fritas -tengo que alimentar mi lado gordo y fofo- , no he podido evitar acordarme de esta canción que espero quite algo de hierro al asunto y os haga sonreír:
Sed buenos.
Danae
Deja a la sociedad que viva en su ignorancia.
Yo sigo confiando en que todo es cíclico. Si hubiésemos nacido en el Renacimiento italiano, seríamos el ideal de belleza.
Laura, lo primero ¡muchas gracias por comentar!
No se si todo es cíclico, si somos tontos o qué, lo que si creo es que estamos obsesionados por etiquetarnos, siempre tenemos que ser «algo». Deberíamos empezar a no preocuparnos tanto por la etiqueta y la apariencia, y más por la persona.
¡Un saludo!
«Como persona que se mueve de un extremo a otro»
Cambiaría «mueve» por… «teletransporta»
Así la vida es más divertida querido L.E.S… Deberías probarlo de vez en cuando. Pero no te acostumbres ¡¡Hay que ser todo un experto para no morir en el intento!!
¡Un saludo!