Soy de las que se levanta con hambre. Hambre de cama, de cinco minutos más, de la tranquilidad de la madrugada y de la oscuridad perezosa. Me levanto a regañadientes, como una niña pequeña. Refunfuño …

Soy de las que se levanta con hambre. Hambre de cama, de cinco minutos más, de la tranquilidad de la madrugada y de la oscuridad perezosa. Me levanto a regañadientes, como una niña pequeña. Refunfuño …